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Jets Impresionantes que emanan de estrellas jóvenes

Actualizado: 12 oct 2023

Recuerdo haber escuchado sobre objetos Herbig-Haro desde el primer año en la escuela de posgrado, donde muchos de los astrónomos estaban interesados ​​en la formación estelar y las estrellas en las primeras etapas de sus vidas. Los objetos Herbig-Haro son chorros impresionantes que emanan de estrellas en formación. El material de estos chorros se propaga en direcciones opuestas y en líneas rectas emanando de la estrella central.


Una imagen con objetos Herbig-Haro, también conocidos como objetos HH. Estos son chorros notables de material que emanan de las estrellas en proceso de formación. Estos chorros se extienden en direcciones opuestas, formando líneas rectas desde sus estrellas centrales. Los objetos Herbig-Haro fueron descubiertos inicialmente por los astrónomos George Herbig y Guillermo Haro en la década de 1940 mientras estudiaban la Nebulosa de Orión. Su enfoque principal eran las estrellas centrales, conocidas como estrellas T-Tauri, de las cuales se originan estos chorros.

Citation: ESA/Webb, NASA, CSA, Tom Ray (Dublin)


El nombre Herbig-Haro, u objetos HH, proviene de los dos astrónomos George Herbig y Guillermo Haro, quienes en la década de los 40’s los observaron por primera vez en la Nebulosa de Orión Ninguno de estos astrónomos estaba interesado en estos chorros, sino en las estrellas centrales de en donde estos se generan. Estas estrellas se llaman estrellas T-Tauri[1]; que se encuentran en las últimas etapas de formación y que eventualmente evolucionarían para formar una estrella como nuestro sol. En esa etapa evolutiva, su luz no es producida por la fusión de hidrógeno en el núcleo sino por un flujo magnético que canaliza el gas ionizado (gas caliente donde los átomos han perdido electrones) desde el disco hacia la superficie de la estrella. La interacción entre el campo magnético, la corona y el disco en las estrellas T-Tauri es compleja y probablemente responsable de la variabilidad observada en estos objetos, la producción de los chorros y, últimamente, de la masa final de la estrella resultante. Esta compleja interacción continúa, incluso después de que se enciende el hidrógeno en el centro. En este punto, se convierte en una estrella de Clase 0, pero se sigue considerando como una protoestrella porque todavía está ganando masa.


Una imagen con una estrella T-Tauri, una etapa de formación tardía en el proceso de convertirse en una estrella similar a nuestro sol. A diferencia de las estrellas maduras, las estrellas T-Tauri aún no producen luz a través de la fusión de hidrógeno en sus núcleos. En cambio, su luz resulta del flujo magnético que canaliza el gas ionizado de un disco circundante hacia la superficie de la estrella. La compleja interacción entre el campo magnético, la corona y el disco circundante en las estrellas T-Tauri es responsable de la variabilidad observada, la producción de chorros y, en última instancia, determina la masa final de la estrella emergente. Incluso después de que comienza la fusión de hidrógeno en el núcleo, estas estrellas continúan ganando masa y se consideran protoestrellas. El estudio de los objetos Herbig-Haro, asociados con estrellas T-Tauri, tiene como objetivo explicar su formación, alineación y las ráfagas periódicas de material expulsado, con campos magnéticos que juegan un papel crucial en la colisión de estos chorros.

Caption: Steve Bowers


El estudio de los objetos HH se concentra en explicar cómo se forman, por qué están tan alineados y por qué el material parece ser expulsado en ráfagas periódicas. Todos los estudios coinciden en que la presencia de campos magnéticos hace que estos chorros se alineen o colimen en línea recta. La explicación de la periodicidad de las explosiones y la formación de flujos colimados varía, pero todas incluyen campos magnéticos. Uno de estos estudios atribuye la periodicidad al pellizco de las líneas del campo magnético y a la rotación diferencial entre la estrella y el disco, lo que resulta en el crecimiento de la presión del campo toroidal [2].[3]. En todos los casos, las partículas aceleradas del viento estelar y los chorros magnetizados calientan el material molecular y atómico, haciéndolo observable en las frecuencias visible, infrarroja y de radio. Cada tipo de luz proporciona información diferente sobre estos objetos y ayuda a entender mejor cómo se forman las estrellas.



Un diagrama ilustrativo que representa un objeto Herbig-Haro, con componentes etiquetados como el chorro polar y el disco de acreción. La alineación y periodicidad de estos objetos están influenciadas por los campos magnéticos. Algunos estudios atribuyen los estallidos periódicos al pellizco de la línea del campo magnético y la rotación diferencial entre la estrella y el disco, lo que resulta en un aumento de la presión del campo toroidal. Este proceso infla las líneas de campo cerca del borde interno del disco, lo que lleva a la reconexión y la formación de plasmoides que se propagan hacia afuera. Estos chorros magnetizados interactúan con el viento estelar y aceleran las partículas, calentando material molecular y atómico. Esta interacción hace que los objetos Herbig-Haro sean observables a través de frecuencias visibles, infrarrojas y de radio, proporcionando información valiosa sobre los procesos de formación estelar.

Credito: Entstehung von Herbig-Haro-Objekten


Aquí, presentamos dos objetos HH observados por el Telescopio Espacial James Webb(JWST por sus siglas en inglés). Probablemente la más espectacular de este par es la imagen de Herbig-Haro 211, la cual muestra detalles asombrosos de los chorros que emanan de la estrella central[4]. No se trata de una única expulsión de gas, sino de explosiones periódicas que los astrónomos intentan explicar mediante campos magnéticos. La estrella que dio origen a este objeto se conoce como protoestrella de Clase 0 y tiene aproximadamente 3.5 veces la luminosidad del Sol y está rodeada por aproximadamente 0.8 masas solares en polvo. Su temperatura es tan solo 33K, muy fría comparada con su temperatura final alrededor de 5500 K, la temperatura del Sol.


Para poder ver dentro de los chorros de HH 211 y ver su estructura, necesitamos telescopios como James Webb. La luz de este chorro es producida por moléculas de hidrógeno, monóxido de carbono y monóxido de silicio, que se calientan cuando el material expulsado choca con el gas ambiental o con gas que se mueve más lentamente. Las velocidades del gas en el chorro no son lo suficientemente energéticas como para dividir las moléculas en átomos e iones más simples, pero suficiente para calentarlas y emitir la luz que podemos observar con Webb.


Una imagen con objetos Herbig-Haro, también conocidos como objetos HH. Estos son chorros notables de material que emanan de las estrellas en proceso de formación. Estos chorros se extienden en direcciones opuestas, formando líneas rectas desde sus estrellas centrales. Los objetos Herbig-Haro fueron descubiertos inicialmente por los astrónomos George Herbig y Guillermo Haro en la década de 1940 mientras estudiaban la Nebulosa de Orión. Su enfoque principal eran las estrellas centrales, conocidas como estrellas T-Tauri, de las cuales se originan estos chorros.

Citation: ESA/Webb, NASA, CSA, Tom Ray (Dublin)


Con la resolución de Webb podemos ver claramente una serie de choques en forma de arco que están alejándose de la estrella central y que parecen ser producidos por eventos periódicos de eyección. La separación de las regiones brillantes y oscuras en estos chorros nos dan información que confirma los mecanismos físicos que dar lugar a explosiones intermitentes de material desde la protoestrella central. También a partir de esta imagen, los astrónomos concluyen que las velocidades de las estructuras eyectadas, que aparecen más cerca de la estrellas, son de aproximadamente 48 a 60 millas por segundo (80 a 100 kilómetros por segundo), donde las estructuras de choque en forma de arco son producidas por el choque del chorro con el material más lento que estos encuentran a lo largo de su trayectoria. Los tres arcos de choque en la imagen podrían tener una edad dinámica de aproximadamente 1000 años, y las eyecciones que produjeron cada uno de los choques observados ocurrieron hace 425 y 290 años [5]. En esta imagen de Webb, también podemos ver chorros bipolares de monóxido de silicio muy finos. Estos muestran una estructura anudada dentro de una cavidad de hidrógeno y CO, la cual está cerca de la estrella y aparece como una pequeña nebulosidad de tono azul. Con estas observaciones los astrónomos también descubrieron que el flujo eyectado es relativamente lento en comparación con protoestrellas más evolucionadas que tienen chorros similares.


Herbig-Haro 46/47, a 1.470 años luz de nosotros en la Constelación de Vela, es otro de los objetos observados por JWST[6]. Como su nombre indica, los jets son producidos ​​por dos protoestrellas. En esta imagen las protoestrellas brillan intensamente en el centro, pero parte de su luz está enterrada profundamente en el disco de gas y polvo, el cual les proporciona más material y les ayuda a ganar más masa. El disco no es visible, pero su sombra se puede ver en las dos regiones cónicas oscuras que rodean las estrellas centrales.


Una imagen de Herbig-Haro 46/47, ubicada a 1.470 años luz de distancia en la Constelación de Vela, observada por JWST. Dos protoestrellas brillantes en el centro de la imagen impulsan los intrincados chorros. La luz de estas estrellas ilumina parcialmente el disco de gas y polvo circundante, lo que contribuye a la acumulación de masa. Aunque el disco en sí no es visible, su presencia es revelada por las sombras proyectadas en forma de dos regiones cónicas oscuras alrededor de las estrellas centrales. Estos objetos Herbig-Haro son el resultado de la actividad de dos estrellas T-Tauri, lo que hace que el patrón del chorro sea más complejo. En particular, un chorro se bifurca en dos hebras, con un lado mostrando distintos arcos de choque mientras que el otro exhibe una tenue nebulosidad roja. La asimetría entre los dos chorros puede atribuirse a varios factores, como que el chorro del lado izquierdo se encuentra dentro de un glóbulo de Bok, una nube oscura de denso polvo y gas. Se necesitan telescopios como el James Webb para explorar la estructura detallada del chorro del lado izquierdo dentro de este glóbulo. La imagen también captura estrellas y galaxias ubicadas más allá de Herbig-Haro 46/47. Además, la imagen muestra eyecciones recientes y más antiguas en el chorro del lado derecho, que aparecen como una tenue línea azul paralela a un pico de difracción a las 2 en punto, y un arco de choque rojo en la esquina superior derecha, respectivamente.

Creditos: NASA, ESA, CSA


En este caso, los objetos Herbig-Haro son producidos por dos estrellas T-Tauri, lo que hace que el patrón de los chorros sea más complejo. La primera diferencia que notamos en comparación con otros objetos HH de una sola estrella, es que el chorro se bifurca en dos hebras [7], lo que se puede ver claramente en la dirección del chorro en la parte inferior izquierda de la imagen. Esto no es lo que observamos en el jet del lado derecho. Solo vemos un jet que muestra dos choques en forma de arco, uno con una gran cantidad de material brillando detrás de la cresta, y el otro es solo una tenue nebulosidad roja en la imagen. El chorro del lado izquierdo no muestra los choques en forma de arco, lo que ha dado lugar a varias explicaciones posibles. Por ejemplo, que uno de los chorros tiene una curvatura sustancial que provoca ondas de choque dentro y en el medio circundante, o la combinación de una onda de choque producida por el material expulsado y otra por la diferencia de presión en el gas circundante [7]. Un factor que contribuye a la diferencia entre el chorro de la derecha y el chorro de la izquierda es que el chorro de la izquierda está dentro de lo que llamamos el glóbulo de Bok, que en la imagen aparece como una estructura elíptica muy tenue que es parecida a una nube inclinada 30 grados respecto a la línea del chorro. Este glóbulo es una nube de polvo denso y gas denso que aparece como una región oscura cuando se ve en luz visible [8]. Debido a que los chorros del lado izquierdo están dentro de este glóbulo, necesitamos telescopios como James Webb para mirar dentro y ver la estructura del chorro con gran detalle. Con Webb también vemos las estrellas y galaxias que se encuentran mucho más allá de la nube. [6]. En esta imagen la eyección más reciente aparece en el chorro del lado derecho como una línea azul tenue paralela al pico de difracción a las 2 en punto. Una de las eyecciones más viejas se ve apenas, aparece como un choque rojizo en forma de arco en la esquina superior derecha de la imagen.



Una imagen de ESO 1336C HH47-47, donde los objetos Herbig-Haro son generados por dos estrellas T-Tauri, lo que da como resultado un patrón de chorro complejo. En particular, un chorro se divide en dos hebras, claramente visibles en la dirección inferior izquierda. El jet del lado derecho muestra dos arcos de choque, uno con un material brillante prominente detrás de la cresta y el otro que aparece como una tenue nebulosidad roja en la imagen. Por el contrario, el chorro del lado izquierdo carece de arcos de choque distintivos, con varias explicaciones propuestas que incluyen una curvatura significativa en uno de los chorros que genera ondas de choque dentro del medio circundante o una combinación de ondas de choque producidas por el material expulsado y las diferencias de presión en el gas circundante. La asimetría entre los chorros está influenciada por la ubicación del chorro del lado izquierdo dentro de un glóbulo de Bok, una estructura tenue similar a una nube vista como una forma elíptica desplazada 30 grados desde la dirección del chorro. Este glóbulo está formado por polvo y gas densos, que normalmente aparecen oscuros en la luz visible. Telescopios como el James Webb son esenciales para explorar la estructura detallada del chorro del lado izquierdo dentro del glóbulo, revelando estrellas y galaxias más allá de él. La imagen también captura eyecciones recientes y antiguas, que se manifiestan como una tenue línea azul paralela a un pico de difracción a las 2 en punto en el chorro del lado derecho y un arco de choque rojo apenas visible en la esquina superior derecha. Estos detalles proporcionan información sobre el momento y los mecanismos de producción del material expulsado en relación con la formación estelar.

Credito: ESO/Bo Reipurth


Como podemos ver, ambos objetos muestran muchos detalles que ayudan a entender cuándo y cómo se produce el material expulsado y cómo estos eventos se relacionan con la formación estelar.


Referencias:

[1] https://www.orionsarm.com/eg-article/47a1353481fb2

[2] C. Fendt 2009 ApJ 692 346

[3] AP. Goodson & R.M. Winglee 1999, The Astrophysical Journal, 524,159

[4] G. Pantolmos, C. Zanni and J. Bouvier, A&A 643, A129 (2020)

[5] https://webbtelescope.org/contents/media/images/2023/141/01H9NWH9JEBFPKVD3M1RRTGGQJ

[6] https://www.aanda.org/articles/aa/pdf/2005/07/aa1821.pdf

[7] https://www.nasa.gov/universe/webb-snaps-highly-detailed-infrared-image-of-actively-forming-stars/

[8] https://articles.adsabs.harvard.edu/pdf/1991A%26A...246..511R

[9] GroundBased ops https://www.eso.org/public/images/eso1336c/


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